Ilusiones mantenidas

Quince años es una excelente edad para demostrar belleza, lozanía, juventud y muchas ilusiones. Todas esas cualidades las mantiene la escuela Provincial de Wushu de Puerto Padre, creada gracias a la dedicación y el empeño del profesor internacional, Segundo Tuan  Carlos Rodríguez Cordoví y Yaíma Justo Velázquez, profesora y vicepresidenta de la institutición, dos jóvenes unidos en las artes marciales que tuvieron la feliz iniciativa de crear esa escuela para bien de todas y todos, donde además involucran a sus hijas desde pequeñas, demostrando la unidad familiar y el ejemplo de enseñanza.

El Chi Kung  es una terapia medicinal de origen chino, perteneciente al mismo grupo de terapias  del taichí, puesta en práctica por ellos.

La apertura de la escuela de Wushu, en la Villa Azul constituyó un importante hecho cultural; fue la primera de su tipo no solo en el territorio, sino en la provincia y más allá.

Desde su nacimiento esta escuela comenzó a tener excelentes resultados; las personas enfermas que allí acuden se rehabilitan: enseñan formas de vida, conductas y costumbres gracias  al empeño de sus fundadores. En nuestra ciudad no hay un solo acontecimiento importante  en el que ellos no estén presentes.

Gracias a la existencia de la escuela de Wushu, en Puerto Padre muchas personas enfermas se  rehabilitaron, lograron  buen estado de la salud, el correcto equilibrio entre la mente y el cuerpo como resultado de ese método terapéutico que posibilita las clases de Chi kun   impartidas en el centro, orgullo no solo de los puertopadrenses, sino de todas las provincias orientales que ellos atienden.