Free the cuban five

Por: Elízabeth Silva R.

Parecía que el raciocinio iba a predominar. En Miami se respiró aires diferentes, quizás de entendimiento, comprensión y amor a la vida.

El esfuerzo de los amigos de Alianza Martiana se patentizó; durante 24 horas permaneció una valla con las fotos de los cinco antiterroristas cubanos presos en cárceles de Estados Unidos, en la céntrica avenida  37 de  Miami.

Muchos esfuerzos hicieron los integrantes de Alianza Martiana para lograrlo, lo que quizás iba a ser  comprensible, en aras de  patentizar libertad de expresión, fue fugaz; ese odio eterno que data más allá del diferendo Estados Unidos-Cuba hizo presencia.

En la capital del terror, de los que abrigan y justifican a los asesinos no se podía permitir que todos conocieran que sus cárceles encierran a cinco cubanos inocentes, mientras inventan justificaciones sin límites para defender a un connotado maestro del terrorismo, juzgado solo por mentir.

Las fotos de René González , Gerardo Hernández, Fernando González, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, fue retirada; ¿ por qué ?, si la Alianza Martiana abonó el dinero acordado en el contrato con la Clear Chanel y aquel es un país “ libre “ . 

El texto de la valla no ofendía a nadie, no violaba nada, eran solo cuatro palabras : “ free the cuban five”, un mensaje de honor, dignidad y justicia, una oportunidad para rectificar actitudes y sentimientos.

Un fuerte olor a azufre inundó la céntrica avenida, comenzaron  a llegar  personas envenenadas por el odio y el temor a que se conociera la verdad de los Cinco, las manipulaciones y mentiras que predominan en ese caso, desde su encarcelamiento en 1998  hasta hoy, que tratan de difamar la posición inquebrantable  de Gerardo.

Como  verdaderas bestias que acaban de salir de sus jaulas, enfurecidas, con deseos de devorar  todo cuanto esté a su alrededor impidieron que permanecieran las fotografías de los Cinco envueltos en su bandera; pero aunque ellos no quieran, esa imagen quedó en las mentes de muchos miamenses de manera irrefutable y la intención de exigir justicia prevaleció.