Otro Diciembre

Por: Elízabeth Silva R.

Otro diciembre termina. René, Gerardo, Ramón, Fernando,  y Antonio continúan su encierro por más de doce años en cárceles distantes, oscuras y frías, lejos de sus familiares y amigos.

Se cumplirán diez años de que se celebrara en Miami el juicio bochornoso que profanó la historia del Derecho en la nación de Lincoln y Martin Luter King. Los representantes del sistema jurídico estadounidense no son ciegos, pero NO quieren reconocer   la realidad de Cuba: que existan personas como los Cinco que no se doblegan ni claudican a pesar de tantos años de mentiras, violaciones y chantajes.

Las ilegalidades del proceso seguido a los Cinco Héroes,  evidencia su naturaleza política;  es indigno NO reconocer pruebas que determinan la inocencia de esos patriotas, hasta los más comprometidos con las  altas esferas del poder en Estados Unidos, reconocen las mentiras y manipulación de las leyes, como el asesor de Cólin Power, quien expresó la connotación política del caso de los Cinco Cubanos. Sin embargo continúan encarcelados.

Ya el señor Obama concedió los indultos para estas navidades, muy bondadoso de su parte liberar traficantes de drogas, delincuentes comunes, connotados asesinos y hasta traidores a su gobierno, sin embargo, no pudo siquiera analizar el caso de los cinco, muchos menos firmar su liberación, solicitud hecha por  personalidades en el mundo, como los premios Nobel de la Paz y más reciente aún, los embajadores y representantes diplomáticos de la Alternativa Bolivariana para las Américas en Cuba, quienes  entregaron  en la Sección de Intereses de Estados Unidos, en La Habana, una carta dirigida al presidente Barack Obama y firmada por más de 25 diplomáticos del mundo, a favor de la liberación de los cinco luchadores antiterroristas. 

René, Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio siguen tras las rejas. Después de un largo proceso judicial, el caso continúa en manos de quienes NO quieren ver la verdad y mucho menos la inocencia de esos cinco cubanos que actuaron por amor a la patria.

Allá, en la soledad de sus celdas, en sus trincheras de ideas, los Cinco NO tendrán brindis, ni cenas, pero  estaremos  juntos, desafiando las distancias, unidos en un abrazo solidario que exige el reconocimiento de la justicia sin demoras y su inmediata liberación.