La Cuba de hoy, más firme y soberana.

Por: Elizabeth Silva Rodríguez.

Los cubanos somos herederos de una larga trayectoria de lucha; desde los aborígenes hasta 1959 estuvimos en pie de guerra, con las armas en la mano para defender este suelo; la contienda del 68, la Tregua Fecunda y la guerra del 95 dieron fe de ello, cuando los mambises tenían la victoria en sus manos llegó la intervención norteamericana y con ella el funesto engendro llamado Enmienda Platt, que le daba derecho al gobierno yanqui a decidir en nuestros asuntos. El pueblo continúo la decisión de no dejar la patria en manos de invasores y explotadores, no descansó hasta lograr la verdadera independencia en 1959.

Los vecinos del norte no se conformaron, continuaron agrediendo y hablando de cosas extrañas, de planes absurdos y utópicos, al que le pusieron por nombre: Plan Bush, nada más de mencionarlo causa risa y desprecio a la vez, en Cuba hasta los niños saben que nunca se podrá poner en práctica esa aberración a la soberanía, aquí nadie va a ceder en el terreno de las conquistas que alcanzamos.

¿Qué consecuencias traería la aplicación del Plan Bush para Cuba?
En primer lugar privatización de la economía, incluyendo la salud, todas las bondades que nos brinda el socialismo desaparecerían, dejarían de existir la propiedad social y cooperativa para cederle paso a los latifundios capitalistas, los campesinos se quedarían sin tierra, los niños perderían sus escuelas, los jóvenes sus universidades, los ancianos la seguridad social, morirían niños de enfermedades evitables, en pocas palabras se implantaría el neoliberalismo.

Martí nos enseñó que … los Estados Unidos se acercan a todo lo que desean y en política hay que prever… , eso es justamente lo que hacemos con inteligencia, ecuanimidad y firmeza de convicciones, prever qué puede ser de nosotros de materializarse esa locura del emperador norteamericano, en la Cuba de hoy no caben planes impuestos desde a fuera, aquí no caben transiciones, la única transición valida es la de ir hacia la superioridad del socialismo, hacia el perfeccionamiento de nuestra sociedad, somos un pueblo de valientes soldados, dispuestos a darlo todo por la libertad que disfrutamos.