Mi niña

Cuando vino al mundo casi ni lo creía, me parecía mentira tenerla entre mis brazos, era una pequeña rosada como una flor, fue una niña algo intranquila y no le gustaba comer ni tomar leche. Era la consentida de la familia.

La llegada de mi hija fue algo muy grande para mi, siempre fue disciplinada, estudiosa, muy estudiosa, conn notas excelentes siempre, buena hija, excelente madre, amiga y compañera.

Siento profundo orgullo de tenerla, hoy es su cuumpleaños, no diré cuántos, aunque nos poquísimos, pero mi niña es buena, dulce, solidaria, amorosa.